Autora y líder del equipo de trabajo
Nellie Zambrana Ortiz
Co-autoras
Iris Negrón Landrón
Vanesa Aponte Medina
Premisa | Apropiado | No apropiado | Por qué |
Los niños de dos años que no puedan articular diez palabras deberían referirse a Intervención Temprana o a algún profesional del habla y lenguaje o psicólogo. | |||
Los niños y niñas preescolares se comportan inteligentemente cuando dicen las cosas correctas, según los adultos las ven. | |||
La escritura debe comenzar a estimularse desde que el niño o niña va a la escuela. | |||
La exploración sexual en la niñez temprana debe mirarse de forma natural, sin dejar de prestar atención a los signos de incomodidad, frecuencia de la acción y contexto. | |||
Cuando los niños y niñas inventan palabras se les debe corregir inmediatamente para que no se acostumbren a decirlas, cuando existen palabras correctas para nombrar las cosas. | |||
Si vemos a un niño o niña con repetidas dificultades para tolerar la estimulación táctil, que rechaza ser tocado, alterado en sus respuestas hacia los mismos, debemos referir la situación a profesionales de terapia ocupacional. | |||
La secuencia lógica del desarrollo motor es muy predecible, por lo que los niños pasan por las mismas etapas y las mismas experiencias. | |||
A los niños no se les debe leer cuentos de asuntos reales y dolorosos, como el divorcio o las enfermedades, porque no los pueden asimilar. | |||
Se sugiere comenzar el adiestramiento para ir al baño cuando los niños caminan y pueden entender simples palabras como “pipi”, “caca” o “panty”. | |||
Intervenir tempranamente ayudará a que el neurodesarrollo se nutra del aprendizaje vía la estimulación. | |||
La creatividad en la niñez se estimula proporcionando herramientas sofisticadas para que sus obras sean de calidad. | |||
Para aprender a leer, los niños necesitan hablar (para ellos, con amigos imaginarios, con otros), escuchar y ser escuchados, y relacionarse con la letra escrita de forma natural y placentera. |
Introducción
En este módulo, se presentarán los temas más relevantes del crecimiento y desarrollo de la niñez temprana para que la educadora* reconozca los diversos procesos y pueda hacer ajustes a sus prácticas de enseñanza teniendo mayor comprensión del alcance de las mismas. Verán el traslapo de los procesos del desarrollo, desde la infancia hasta los seis años. Este continuo les ayudará a enlazar sus ideas y preguntas sobre cómo se desarrolla la niñez puertorriqueña. Además, les recomendamos consultar los otros módulos de temas específicos, aprender a gradar las actividades cuando sea necesario, a lidiar con las barreras administrativas y a ser ingeniosas en la marcha.
Metas de las autoras
Esperamos que, con la lectura y comprensión de este material, las educadoras puedan:
- Entender las características del desarrollo humano a través de la vida y las tendencias del neurodesarrollo, fundamentales para el aprendizaje en esta etapa.
- Entender la relación entre las dimensiones físico-motor-sensorial, socioemocional y cognoscitivo-intelectual, desde la infancia hasta la niñez temprana, y sus manifestaciones en la niñez.
- Evaluar y revisar las ideas y percepciones que sostienen sus prácticas educativas sobre la niñez temprana, como un proceso de autoeducación.
En adelante, se usa el vocablo en la forma femenina, pero nos referimos igualmente a los educadores y cuidadores masculinos. De la misma manera, cuando hagamos referencia a “educadores” o “cuidadores” (forma masculina), nos estaremos refiriendo, por igual, a las féminas.
Introducción al concepto de desarrollo humano durante la niñez
Las niñas y los niños tienen derecho a educarse, a desplegar sus talentos, a conocer su identidad nacional y a ser felices. Para eso, los educadores y cuidadores de la niñez temprana debemos facilitar los procesos de su crecimiento y desarrollo, aportando a sus vidas nuestros conocimientos y compromiso profesional. Un buen paso es reconocer que desarrollo se refiere a: los cambios en la función del organismo en su contexto social, que comienza con la concepción y continúa a través del ciclo de toda la vida. Esos cambios involucran experiencias que promueven la adquisición de destrezas cada vez más complejas con respuestas más sofisticadas. El desarrollo humano es influenciado por una interconexión de procesos biológicos, intelectuales y socioemocionales que lo hacen complejo y, a la vez, fascinante.
Nos referimos como desarrollo típico a los cambios en los distintos procesos, cuya trayectoria concuerda con la de la mayoría de individuos de la misma especie, edad y contexto sociocultural. Cuando uno o varios de estos procesos no se manifiestan acorde con la amplia población decimos que hay deficiencia en el desarrollo. Los factores asociados a deficiencias en el desarrollo son: prematuridad, peso al nacer menor de 5 libras con 8 onzas, ventilación mecánica, hemorragia intraventricular (corazón), espina bífida, episodios de bradicardia severa, desorden genético o metabólico, problemas visuales (retinopatía del prematuro), hidrocefalia, infecciones y pérdida auditiva. Las educadoras y profesionales de la salud deben trabajar en sintonía para prevenir, adaptar, remediar e intervenir lo más tempranamente posible en promover, al máximo, el desarrollo de las capacidades de los niños.
Procesos fundamentales de las dimensiones del desarrollo
Procesos biológicos
Movilidad, crecimiento músculo-esqueletal, sensación, coordinación, maduración neurológica
Procesos socio-emocionales
Personalidad, temperamento, actitudes, emociones, relaciones interpersonales, socialización y cultura
Procesos intelectuales
Pensamiento, inteligencias, lenguaje —simbólico y gráfico—, estilos de aprendizaje, percepción, creatividad, estrategias para pensar y solucionar problemas