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La diversidad

Un camino hacia la transformación de una comunidad resiliente

Sugeily Ortiz Rivera, M. Ed.

Maestra en el salón con tres estudiantes preescolares y un padreLa diversidad, desde una mirada de oportunidad, es el punto de partida para reconocer que todas y todos somos únicas y únicos, que contamos con potencialidades que aportan a la sociedad. No obstante, si tu mirada está nublada, verás la diversidad como “algo que falta” o minimizarás las capacidades de las otras personas (Lamas R. & Murrugarra Abanto, s.f.). Galán Peñalva (2012) se refiere a la diversidad como “la presencia de variedad y al reconocimiento de la existencia de aspectos cualitativos propios de las cosas, seres u objetos que hacen que no sean idénticos”.

Cuando aceptamos la diversidad, facilitamos la adaptación y reacción en las personas de que todas y todos somos diversos y únicos. Aceptar que somos diversas y diversos —y que nos acompañan retos— supone que conocemos nuestras potencialidades y trabajamos para verlas desarrollarse. Podemos establecer que la diversidad en sí es un concepto amplio, que nos permite ver las distintas maneras de ser diferentes como seres humanos y que, a pesar de tales diferencias, seguimos siendo igualmente humanos. Esa diversidad se manifiesta en nuestro entorno de múltiples maneras: los idiomas, las creencias, los estilos de vida, las costumbres, las culturas, la alimentación, los estilos de aprendizaje, las actitudes, los valores, entre muchos otros aspectos.

Para aceptar la diversidad, necesitamos hacer un alto introspectivamente. Debemos prepararnos y conocer cómo tratarla, respetarla y valorar la dignidad de cada persona (NAEYC, 2020). Para ello, requerimos hacer cambios de actitudes: es decir, un cambio de lentes. Antes, explicábamos que, cuando miramos la diversidad con una vista nublada, la percepción de lo que veíamos traía consigo una connotación negativa. Ahora, cuando nos colocamos lentes para mejorar nuestra visión, vemos con mayor claridad. Es así que, cuando enfrentamos un reto visual (supongamos de actitud) ante la diversidad, colocarnos otros lentes nos ayudará a mejorar la perspectiva sobre ella.

Te propongo colocarte unos lentes diferentes para que puedas enfocar y ver la diversidad desde un punto de vista distinto, de reconocimiento, tolerancia y respetode valor y positivo.

Resiliencia y diversidad

Madre y niño con Sindrome Down¿Cómo somos resilientes ante la diversidad? Las personas clasificadas bajo la categoría diversidad están expuestas a experiencias negativas y de rechazo. Esto sucede porque nuestra sociedad tiende a mantener a distancia aquello que es diferente. Por eso, es imperativo desarrollar la resiliencia en esta población. Tenemos que adquirir conciencia de cómo la comunidad diversa se va a ver aún más afectada. En nuestra reflexión humana, en los espacios de autoevaluación e introspección, las educadoras y los educadores veríamos solidaridad, valía individual y humana en estas situaciones, y provocaríamos un cambio de actitudes.

El primer paso para enseñar sobre resiliencia es aprender a mirarte a ti misma o a ti mismo; luego, trabajar y hacer los cambios hacia la resiliencia. Esta última se aprende principalmente a través del modelaje en la niñez temprana y en el diario vivir, no es una característica propia del ser humano. Pérez Márquez (2015) la describe como “la capacidad que tienen los seres humanos para hacerle frente a la adversidad, superarla y salir fortalecidos de ella”.

Caminar en la transformación de ver la diversidad siendo resiliente es un acto de reconocer la abundancia en lo diferente. La resiliencia te muestra que eres capaz de adaptarte, reconstruirte y rescatarte ante experiencias desafiantes (Grotberg, 1995, según citado en Fiorentino, 2008). Aún en medio de esas experiencias, reconoces que lo que existe a tu alrededor te nutre, te ofrece calidad y aporta a la constante construcción de tu ser. Permanecer en metamorfosis te hace oportuno u oportuna para recibir la diversidad como crecimiento, apoyo y enseñanza; así también, propicias la resiliencia en ti.

Actitudes positivas ante la diversidad desde la resiliencia

Si deseamos fomentar características resilientes, debemos comenzar identificando qué nos incomoda emocionalmente. De esta manera, cuando logremos definirlo, podremos darles paso a las oportunidades. Este es un hecho que toda persona resiliente debe concebir: convertir la queja en riqueza. Es importante delimitar lo que nos inquieta para aceptar que, en el proceso de sobrepasarlo, no dejaremos de avanzar. Por ello, aceptar lo que nos sucede nos hará movernos para superar la situación. Pero, ¿cómo lo hacemos?

Te preguntarás: ¿cómo es posible hacer esto sin haberte dado cuenta de que ya lo has realizado? Tal vez con dudas e inquietudes, pero ya superaste el descontento. Has aclarado tu visión acerca de lo que te aquejaba y has sacado la fuerza de voluntad para provocar cambios. Te has rodeado de personas que aportan algo en ti y te complementan. Te has responsabilizado de tus actos y sus consecuencias. Finalmente, has accionado y vislumbrado positivamente la solución del problema. Te propongo un esquema de actitudes positivas que te ayudarán a seguir aceptando la diversidad desde la resiliencia.

Figura 1

Esquema de actitudes positivas ante la diversidad desde la resiliencia

Figura 1: Esquema de actitudes positivas ante la diversidad desde la resiliencia. Estas son: (1) Fija metas con una buena actitud. (2) Rodáte de quienes aportan algo en ti y te complementan. (3) Aprende de los errores. (4) Reconoce tus capacidades ante las situaciones. (5) Sé tu propio motivador o tu propia motivadora. (6) Acepta los cambios. (7) Cree en tus potencialidades.

Ahora, resalta tus diferencias, particularidades y potencialidades; celébralas porque has sido capaz de reconocerte. Asimismo, esperamos que el mundo te mire por tus ganas de salir adelante ante cualquier situación porque te fijaste una meta y superaste adversidades con buena actitud. No olvides que este es un proceso constante y que comienza desde nuestro yo. Hay construcción diaria en nuestras percepciones, cambiamos de lente para mayor claridad cuando la visión se nos empaña. No olvides que podemos manejar las emociones, mas no podemos controlar las situaciones que las despiertan. La diversidad está plasmada en todas partes, y es nuestro compromiso resaltarla por lo bueno, por lo que podemos hacer y por lo que podemos ayudar para trabajar en común.

Resiliencia y la niñez diversa

Dos estudiantes con diversidad funcionalFigueroa Fuentes (2016) nos propone reflexionar acerca de la conexión neural que existe cuando puedes entender y sentir la experiencia vivida de otra persona. A fin de reconocer esas experiencias, es necesario demostrar confianza y conocimiento para establecer vínculos resilientes. Cuando sentimos empatía con las situaciones adversas que vive nuestra niñez, hacemos que aquella que es diversa desarrolle vínculos seguros para afrontar las adversidades. Pearson y Kordich (2020) nos comparten que es vital promover niños y niñas resilientes, si se hace mediante relaciones con modelos positivos, además de presentarles oportunidades para aprender habilidades y participar en actividades significativas. Cuando dotamos a la niñez, con o sin diversidad, contribuimos, de manera significativa, a generar resiliencia y un desarrollo saludable (NAEYC, 2020).

Ya decíamos que la niñez diversa afronta situaciones adversas en nuestra sociedad. Por ello, desarrollar actitudes y abrir espacios de diálogo y modelaje propiciará dotarla de modelos, ya sea a través de experiencias propias o de literatura infantil apropiada y adecuada a su nivel. La resiliencia se basa en la equidad y en experiencias para todo el mundo por igual. Hay que crear conciencia de que tanto las educadoras y educadores como las familias tenemos que abogar por la equidad de nuestra niñez con diversidad. Ventilar que la desigualdad duele está bien, solo promulgando lo que no es correcto hará un cambio de actitud para el bien de los nuestros. Solo esperamos proveer las herramientas que harán que, ya sea solos o en conjunto, nuestra niñez diversa afronte exitosamente el mundo en el que vivimos.

Referencias

Figueroa Fuentes, W. (2016). Las relaciones socio emocionales y los lazos duraderos: Una voz desde la realidad. En A. López de Méndez, M. de los A. Agrinsoni de Olivo, W. Figueroa Fuentes, R. Ortiz López y G. Corujo Martínez, Socioemocional (Módulo 11 de Alcanza). Centro de Investigaciones Educativas, Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. https://alcanza.uprrp.edu/modulos/modulo-11/

Fiorentino, M. T. (2008). La construcción de la resiliencia en el mejoramiento de la calidad de vida y la salud. Suma Psicológica, 15(1), 95-113. https://www. redalyc.org/articulo.oa?id=134212604004

Galán Peñalva, F. (2012). Diversidad y educación: diagnóstico y propuesta
de organización para la construcción de una escuela inclusiva. Un estudio de casos en la provincia de Jujuy-Argentina. Tesis doctoral, Universidad de Barcelona. Repositorio digital de la UB. https://www.tesisenred.net/bitstream/handle/10803/565700/FGGP_TESIS.pdf?sequence=1&isAllowed=y

Lamas R., H. & Murrugarra Abanto, A. (s. f.). Una mirada desde la diversidad: El enfoque de resiliencia. Catholic.net. https://es.catholic.net/op/articulos/9139/cat/433/una-mirada-desde-la-diversidad-el-enfoque-de-resiliencia. html#modal

National Association for the Education of Young Children (NAEYC). (2020). Declaración de posición de la NAEYC: Promover la equidad en la educación infantil. https://www.naeyc.org/sites/default/files/globally-shared/downloads/PDFs/resources/position-statements/dap_ps_spanish.pdf

Pearson, J. & Kordich, D. (2020). Building resilience in young children. Booklet for parents of children from birth to six years. Best Start: Ontario’s Maternal, Newborn and Early Child Development Resource Centre. https://resources.beststart.org/wp-content/uploads/2018/11/K35-E.pdf

Pérez Márquez, L. (2015). Promoción de resiliencia en la infancia. [Trabajo Final de Grado, Modalidad Monografía]. Universidad de la República de Uruguay. https://sifp.psico.edu.uy/sites/default/files/Trabajos%20finales/%20Archivos/tfg_-_lucia_perez.pdf